Mientras trataba de aprender a tocar la guitarra a mis 12 años (y descubría que mi oído musical it’s just not there), jamás imaginé que fuera posible hacer música a base de gruñidos, jadeos, bolitas y megáfonos.
Eso se lo dejo a Sxip Shirey, que es un eximio intérprete de otra música, rara, pero atractiva.
Esto ya no debe sorprender a nadie, lo encontré en TED.