A ver, niño Marcelo, repita conmigo: «La obra en Constituyentes dejó el tránsito peor de lo que estaba».
Mientras el paso inferior Acueducto – Constituyentes estaba en obra, con carriles bloqueados y máquinas traqueteando todo el día, mi recorrido de casa a la oficina era de 30 a 35 minutos a las 8 de la mañana.
Ahora que se inauguró el portentoso «Deprimido Constituyentes-Eje 5» (nunca dejes que un burócrata ponga nombre a tu bebé), resulta que los 3 carriles cargados de autos que antes tenían un semáforo para ingresar a Constityentes, ahora pasan por abajo y se incorporan sin miramientos a UN carril, por la fuerza y a golpes de bocina/claxon.
El resultado? Una hora y 20 minutos de trayecto, por una avenida intransitable desde Periférico a Santa Fe. Quienes conozcan la avenida, entenderán que no hay mucho recorrido fuera de esos límites.
Espero con ansias que inauguren el otro paso inferior, a ver si puedo ver una película entera cada mañana antes de llegar a la oficina.
A ver, niño Marcelo, obras por obras no sirven, aunque le consigan votos. Hagamos las cosas bien.