Desde las catacumbas del Marqués de Sade

Ayer estuve en una reunión de publicistas y fauna asociada. Todas las compañías representadas en la reunión son parte del mismo grupo económico que las compró como parte del proceso de consolidación que se vive en la industria desde los ’70.

Durante toda la semana, algo me dijo que tenía que buscar una excusa para no ir. Ayer confirmé plenamente mi sospecha. Fue una tortura.

Este grupo económico se dedica a comprar empresas que prestan servicios publicitarios de algún tipo: agencias, empresas de investigación, centrales de medios, etc., y los asistentes al evento fueron supuestamente los más altos ejecutivos de cada compañía.

Como era de esperar, había más de una empresa del mismo tipo presente, y lo que me sorprende mucho es que en el ensayo general de la mañana no se hayan dado cuenta que el evento iba a ser una pérdida de tiempo si lo presentaban como lo hicieron. Tres o cuatro agencias de publicidad me explicaron con un desesperante nivel de detalle a qué se dedicaban. Agencias de relaciones públicas se preocuparon por educarme acerca de QUÉ SON las relaciones públicas, mientras que empresas que hacen estudios de mercado detallaban hasta la exasperación sus metodologías y la cantidad de gente a la que le preguntaban cada cuánto cagaba. Las centrales de medios no sólo compran medios. Go figure.

El suplicio no acabó allí. Los presentadores fueron ooootro tema. Directores generales, directores ejecutivos, vicepresidentes y otros exponentes de la fauna corporativa se pararon sobre un escenario mal iluminado y arrullaron al público con una lectura detallada del powerpoint que le tocó a cada uno. Esos son los vendedores de esta industria? Hubo de todo. Desde tipos que estaban incómodos con la atención que recibían hasta otros no aptos para comunicarse en la gente, pero unos actuarios excelentes.

Destacable: el director de una empresa que se dedica a «construir marcas» y al parecer lo hacen bien. Nos hizo reír, no leyó nada, dijo cosas interesantes y realmente fue el único punto para el que valió la pena salir del sopor.

Muchas de estas empresas son primeras en su actividad. Esto me hace pensar que nuestra competencia está borracha y no sabe leer.

Me exasperé bastante con todo el evento, me da la impresión que perdí 4 horas sin ningún resultado adivinable. Ninguno de los tipos que supuestamente quieren hacer negocios conmigo me logró vender NADA. Si la única ventaja es que pertenecen al mismo grupo, lo que me da miedito es la poca probabilidad de subsistencia del grupo en México.

Señor director de una gran agencia de relaciones públicas: Ud. no sabe qué hace una central de medios? En sus 20 años de experiencia, jamás se encontró con una? Y si ya sabe, por qué piensa que es necesario explicar qué es una agencia como la que dirige? Piensa que nunca oímos de ello?

Concéntrense en resultados. Cuéntenme sus logros y con cuánta pasión trabajaron para alcanzarlos. De nada me sirve que me describan su «herramienta» Brand-Lead-Life-Vest que mide las reacciones de las células bastón de la retina de las tortugas ante los comerciales de whisky.

Y alguien, quienquiera que sea, devuélvame mis 4 horas.