Hace tiempo estuve muy entusiasmado con el parapente y pude aprender a volar entre Córdoba y México. Apenas llegué a México me puse en contacto con un grupo de voladores y dí muchas vueltas por ahí aprendiendo y disfrutando.
La mayoría de las veces estábamos en Malinalco, un pueblo muy lindo y con buenísimas condiciones para volar. Si vas por ahí, se consigue muy rica comida italiana en un restaurant frente a la plaza central, y Beto’s sirve las mejores empanadas de cazón que he probado. Claro que no todo se trataba de volar, como podrás notar.
Recuperé este set de fotos, creo que de mayo-junio de 2002.